LEGANÉS – La Unión Empresarial de Leganés (UNELE), y en especial su presidente, Augusto Fuentes, se han colocado de forma involuntaria en el foco informativo a raíz de unas informaciones difundidas por el diario Público y que ha ratificado en un comunicado público uno de los directivos de esta asociación.
Florentino Gutiérrez Jiménez, miembro hasta hace unos días de la Junta Directiva de UNELE, ha presentado su dimisión irrevocable y ha remitido una nota en la que, basándose en las informaciones publicadas en prensa y en su experiencia personal, apunta que el presidente de la asociación “pasó una serie de facturas muy dudosas para que fueran abonadas por el Consistorio” de Leganés, en las que “o bien se incluían servicios que no se habían prestado” o se recogía un “concepto exagerado para el que se establecía en la factura”.
En este sentido, Gutiérrez insta a la CEIM (Confederación Empresarial de Madrid-CEOE) que tome cartas en el asunto y “zanje de inmediato lo que es una vergüenza para el colectivo de empresarios que representa UNELE a través de su presidente”. “No queremos que casos como este u otros parecidos sigan salpicando la honorabilidad del sector empresarial, económico y social del que formamos parte”, añade.