MÓSTOLES – El Ayuntamiento de Móstoles ha iniciado el expediente de rescisión del contrato de suministro y servicios energéticos y mantenimiento integral de Edificios Municipales y Centros Educativos del Municipio adjudicado a Cofely, el más importante adjudicado en el Ayuntamiento, por un servicio a prestar en 12 años y un importe de más de 73 millones de euros que puso a la ciudad en el foco de la trama Púnica.
La alcaldesa de Móstoles, Noelia Posse, manifestó su “orgullo” por poder anunciar el principio del fin del “capítulo más oscuro y negro de la historia de la democracia en la ciudad de Móstoles, protagonizado por el Partido Popular y por quienes en primera persona formaban parte del Gobierno popular en 2004, y que hoy aún son líderes de ese partido, como son Mirina Cortés, Alberto Rodríguez de Rivera y Mercedes Parrilla”.
La adjudicación de este contrato en cuestión a Cofely, que empezó a investigar poco tiempo después el juez Eloy Velasco y fue incluida en la Trama Púnica, es la causa que hizo dimitir y mantiene a día de hoy en condición de investigado al exalcalde Daniel Ortiz.
Al finalizar los procedimientos administrativos, se trabajará en la remunicipalización del servicio.
El expediente de rescisión del contrato incluye, además de informes técnicos y jurídicos, un análisis financiero del cumplimiento del contrato hasta el pasado 31 de agosto de 2018, elaborado por un consultor financiero especializado, y que concluye que la empresa adeuda al Ayuntamiento más de 4 millones de euros por reiterados incumplimientos.
Además, se han revisado individualmente más de 28.000 partes de trabajo de mantenimiento correctivo, estableciendo el porcentaje de ejecución de los mismos en los plazos contratados, que fue solo de un 40% en los 51 meses de contrato.